Se puede definir el Mutualismo simultáneamente
de tres maneras:
b)
Como una actitud
c) como una acción.
Como un ideal: El Mutualismo es solidaridad humana, caridad,
cooperación mutua, asistencia y consuelo.
Todos estos ideales anidan en lo más hondo del ser humano normal y éste
siempre los llevará consigo y los defenderá especialmente en la adversidad.
Como una actitud: Si el hombre es consecuente con estos ideales o
valores, tratará de vivirlos, de llevarlos a
la práctica cada día. Es decir, los convertirá en una forma de vida y en
una actitud de servicio al prójimo.
Como una acción: Porque todo ideal y toda actitud son verdaderos si
se expresan en acciones concretas de ayuda y solidaridad con sus semejantes; y
ello empieza en el hogar, sigue en el trabajo, en los lugares de convivencia,
etc. Por eso, a más acciones mutualistas
de cada uno de nosotros, más grandes serán los efectos favorables y mayor será
el apoyo que podremos prestarnos los unos a los otros.